Pasos para sustituir un grifo de lavabo

Pasos para sustituir un grifo de lavabo

Si has llegado hasta aquí, es porque seguramente te has planteado cambiar el grifo de tu lavabo. Ya sea porque el viejo grifo está goteando y te vuelve loco, o simplemente porque quieres darle un aire nuevo a tu baño. No te preocupes, en este artículo te guiaré a través de los pasos para sustituir un grifo de lavabo, de manera sencilla y sin complicaciones. Así que, ¡manos a la obra!

¿Qué herramientas necesitas?

Antes de lanzarte a la aventura de cambiar el grifo, es importante que tengas a mano todas las herramientas necesarias. Esto hará que el proceso sea mucho más fluido. Aquí tienes una lista de lo que necesitarás:

  • Llave inglesa o llave de grifo
  • Destornillador (plano y de estrella)
  • Un cubo o recipiente para recoger agua
  • Trapo o esponja
  • Teflón o cinta de fontanero

Pasos previos antes de empezar

Antes de ponerte manos a la obra, es vital que sigas algunos pasos previos. Así evitarás sorpresas desagradables durante el proceso:

  • Cerrar la llave de paso: Localiza la llave de paso de agua del lavabo y ciérrala. Es crucial para evitar inundaciones. Si no sabes dónde está, generalmente se encuentra debajo del lavabo.
  • Vaciar el grifo: Abre el grifo para que se vacíe toda el agua que pueda quedar. No querrás que te caiga un chorro de agua cuando empieces a soltar las conexiones.
  • Colocar un cubo: Pon un cubo o recipiente debajo del lavabo para recoger cualquier posible fuga de agua durante el proceso.

Desmontar el grifo antiguo

Ahora que tienes todo listo, es hora de desmontar el grifo antiguo. Aquí te explico cómo hacerlo en unos sencillos pasos:

  • Localizar los tubos de conexión: Busca los tubos de agua caliente y fría que están conectados al grifo. Normalmente, son de metal o plástico.
  • Desconectar los tubos: Utiliza la llave inglesa para aflojar las tuercas que conectan los tubos al grifo. Hazlo con cuidado para no dañar las roscas.
  • Desmontar el grifo: Una vez desconectados los tubos, busca los tornillos que fijan el grifo al lavabo. Usa el destornillador para quitarlos. Si está muy atascado, un poco de aceite lubricante puede ayudar.

Preparar el nuevo grifo

Ahora que el grifo antiguo ha sido retirado, es el momento de preparar el nuevo grifo. Asegúrate de que el nuevo grifo sea compatible con tu lavabo y que venga con todas las piezas necesarias. Aquí hay un par de consejos que te pueden ayudar:

  • Leer las instrucciones: Cada grifo viene con un manual. Aunque a veces parece un rollo, es útil para saber cómo instalarlo correctamente.
  • Comprobar las juntas: Asegúrate de que las juntas de goma estén en buen estado. Si están desgastadas, es recomendable cambiarlas para evitar futuras fugas.

Instalar el nuevo grifo

¡Ya casi has llegado al final! Ahora es el momento de instalar el nuevo grifo. Sigue estos pasos:

  • Colocar el grifo: Introduce el nuevo grifo en el agujero del lavabo y asegúralo con los tornillos que vienen en el paquete.
  • Conectar los tubos: Conecta los tubos de agua caliente y fría al grifo, asegurándote de que estén bien apretados. Aquí es donde el teflón puede ser útil; envuélvelo en las roscas para asegurar una mejor estanqueidad.
  • Ajustar el grifo: Usa la llave inglesa para apretar las tuercas, pero ten cuidado de no apretar demasiado, ya que podrías dañar las roscas.

Comprobar que no haya fugas

Antes de dar por finalizada la instalación, es importante que compruebes que todo funciona correctamente. Aquí te dejo un par de consejos para esta etapa:

  • Abrir la llave de paso: Vuelve a abrir la llave de paso lentamente mientras observas si hay alguna fuga en las conexiones. Si ves que hay agua saliendo, es posible que necesites apretar un poco más las tuercas.
  • Probar el grifo: Abre el grifo para asegurarte de que el agua fluye correctamente. Escucha si hay algún goteo o ruido extraño.

Una vez que estés seguro de que todo está en orden, puedes dar por finalizada la instalación. Sin embargo, aquí hay unos consejos finales que podrían serte útiles:

  • Mantenimiento: Realiza un mantenimiento regular de tu grifo para asegurarte de que siga funcionando bien. Limpia cualquier acumulación de cal o suciedad.
  • Revisar las juntas: De vez en cuando, revisa las juntas de goma y cámbialas si es necesario para evitar futuras fugas.
  • Disfruta de tu nuevo grifo: Ahora que has completado el proceso, ¡disfruta de tu nuevo grifo! Lo has hecho tú mismo y eso siempre tiene una recompensa satisfactoria.

Recuerda que seguir estos pasos para sustituir un grifo de lavabo no solo te ahorrará dinero, sino que también te dará la satisfacción de haber realizado un trabajo por ti mismo. ¡Felicitaciones por tu nuevo grifo!

Si necesitas un fontanero en Barcelona no dudes en contactar con nuestro equipo.